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Alrededor de 700 personas se reunieron en Bariloche para gritar: “Cristina no está sola”

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Concentración en el Centro Cívico y marcha al Juzgado Federal.

Cristina y la “V” de la victoria; con la marcha partidaria como fondo sonoro, predominó la liturgia peronista (fotos: Facundo Pardo).

En concordancia con lo que sucedió en diversas partes del país, con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como eje, en Bariloche también se reunieron personas en desacuerdo con la condena a Cristina Fernández.

La cita fue en el Centro Cívico, a las 16, y se extendió durante algo más de dos horas.

Banderas y carteles, en el Centro Cívico.

Predominaron banderas con referencias partidarias, de agrupaciones como el Frente Patria Grande, de Juan Grabois, o Miles, de Luis D’Elía. Obviamente, La Cámpora estuvo presente, y se desplegó un gran cartel del Partido Justicialista. Además, hubo representación gremial, como por ejemplo de la Central de Trabajadores de la Argentina.

La CNEA y referencias a Cristina y Néstor Kirchner.

Asimismo, se observaron pancartas con referencias a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), el centro de jubilados Estrella Federal, la Asamblea de poetas, los murgueros agrupados bajo el nombre de Herederos de Norma Plá… También estuvieron los colores mapuches y hasta un letrero demandando la libertad de Facundo Jones Huala.

Las imágenes de Cristina abundaron.

Pareció como si en el pedido por Cristina Fernández hubiesen convergido varios reclamos, lo que se reflejó en un cartel que decía: “Unidad de todas las luchas”. Aunque hay que aclarar que esa frase no se cumplió a rajatabla, como quedó demostrado cuando arribó al Centro Cívico una gran columna que había salido de la sede local de la Unión de Trabajadores de la Educación de Río Negro (Unter) –en el marco de una jornada de medida de fuerza–, donde también había presencia de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) e integrantes del Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad. Así, de esos manifestantes, tras marchar por Mitre, los que pertenecían a Unter y ATE se sumaron al reclamo por Cristina, mientras que los miembros de la citada coalición de izquierda optaron por retirarse. “No vinimos para ser parte del acto ‘proselitista’”, indicó, antes de irse, una mujer.

Más allá de las banderas partidarias, se vieron muchos letreros escritos a mano, con diversas inscripciones.

En la plaza del Centro Cívico, en tanto, se hizo una especie de representación de un partido de fútbol, con “jugadores” con pecheras indicativas de los equipos enfrentados: “Cristina” y “Comunidad organizada”, por un lado; por el otro, “Mauricio Macri”  y “Héctor Magnetto”.

Alrededor de setecientas personas se reunieron en el Centro Cívico.

Desde la agrupación La Tercera habían preparado otra intervención, pero no pudo desarrollarse del modo que pretendían. La intención era que, en el lago, se extendieran cuatro banderas de gran tamaño llevadas en kayaks, para, entre todas, formar la frase “Justicia federal vergüenza nacional”, pero el mal tiempo lo impidió y debieron contentarse con exhibirlas en el Centro Cívico.

La intención era que la frase se leyera en el el lago, pero el clima lo impidió.

Más allá de eso, en la plaza se vieron algunos referentes políticos, como, por ejemplo, Ramón Chiocconi, Osvaldo Nemirovsky, y las concejalas Julieta Wallace y Roxana Ferreyra.

Cartulinas desplegadas…

En el punto de máxima convocatoria, hubo alrededor de setecientas personas, las cuales escucharon la lectura de un documento único donde, entre otras cosas, se señalaba: “Venimos a gritar bien fuerte que Cristina no está sola, que la patria no se vende, que no nos vamos a arrodillar frente al Poder Judicial mafioso y un gobierno que hambrea, persigue y entrega”.

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Se escucharon cánticos varios, a viva voz.

“Cristina es inocente y la queremos viva y libre”, leyeron, para luego entonar la marcha peronista.

La ocurrencia a la hora de escribir carteles…

Cuando parecía que todo finalizaba, prevaleció la idea de trasladarse hasta el Juzgado Federal, ubicado en la avenida San Martín.

La Cámpora desplegó sus filas.

De esa forma, tras una camioneta con un equipo de música que no dejaba de repetir la marcha peronista cantada por Hugo del Carril, se encolumnaron los manifestantes, quienes, al llegar a la dirección del Poder Judicial, se detuvieron unos minutos.

El fervor se expresó de manera constante.

En las paredes de la sede federal, pegaron afiches con los rostros y nombres de Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti, Carlos Rosenkrantz, Luis Caputo, Federico Sturzenegger, Mauricio Macri y Patricia Bullrich, antecedidos por un sugestivo “se busca”.

Carteles pegados en el exterior del Poder Judicial Federal.

Después, la caravana, siempre con Hugo del Carril como voz omnipresente, retornó al Centro Cívico.

Predominó el sentiemiento de unidad.

Durante las algo más de dos horas que duró el reclamo a favor de la expresidenta, se apreciaron dos situaciones que generaron cierta tensión. Por un lado, frente al Juzgado Federal, mientras los manifestantes se detenían y cantaban, desde una ventana de un edificio ubicado enfrente, una persona gritó: “Cristina chorra”. El otro momento ríspido se dio sobre el final, cuando quienes marchaban iban por la calle España rumbo a la plaza emblema de Bariloche y un remisero aceleró casi rozando a quienes integraban la manifestación, para luego ingresar raudo en un estacionamiento.

Salvo esos instantes, la jornada se desarrolló con tranquilidad.

Tras más de dos horas en las que prevaleció la liturgia peronista, la manifestación se dispersó.