Sostuvo que “sus discursos” no los hace a título personal “sino en su carácter de Jefe de Estado Argentino”.
La exdiputada de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, se ha posicionado firmemente en oposición al presidente Javier Milei, tras un controvertido discurso comentado en el Foro Económico Mundial de Davos, que según ella, viola la Constitución Nacional. En una carta abierta vigorosa, publicada en sus redes sociales, Carrió se ha pronunciado de manera clara contra las expresiones del presidente, destacando la obligación de los mandatarios de respetar la ley suprema de la nación.
Carrió argumenta que cualquier palabra pronunciada por Milei no representa una opinión personal sino una posición oficial como Jefe de Estado Argentino, lo que aumenta la seriedad y la responsabilidad de sus declaraciones. Según la exdiputada, las palabras y actos de un mandatario deben estar alineados con los principios establecidos en la Constitución Nacional y los tratados internacionales sobre derechos humanos.
La situación se intensifica cuando Carrió advierte que cualquier discurso o acto presidencial que intente violar la Constitución podría carecer de legalidad, transformándose en una acción de facto contraria al artículo 36º de la Carta Magna. Este artículo protege el orden constitucional y establece penas para aquellos que lo transgreden. Ante esto, Carrió está preocupada por la repetición de discursos contrarios a los derechos humanos garantizados por la Constitución y sus tratados asociados.
El contenido de las declaraciones de Milei ha desencadenado intensos debates políticos en Argentina, y no solo ha provocado el rechazo abierto de la Coalición Cívica sino que también ha suscitado críticas internas en su propio partido. Los detractores de Milei en el Congreso creen que, además de debilitar derechos fundamentales, sus palabras podrían tener serias implicaciones en la legitimidad del gobierno y la estabilidad institucional del país.
Carrió, por su parte, se ha comprometido a seguir luchando contra lo que percibe como una amenaza a los principios de la Constitución y el Estado de Derecho. Para la líder de la Coalición Cívica, es fundamental seguir alertando y denunciando situaciones que puedan erosionar profundamente la democracia argentina. Su postura deja en claro que, según ella, la integridad de las instituciones democráticas está en juego y que es vital vigilar con atención las acciones del gobierno en pro del cumplimiento de la legalidad vigente.
