Durante los días más fríos del año, las bajas temperaturas pueden ser un fuerte enemigo para quienes cultivan plantas en sus hogares. El invierno no tiene por qué significar la pérdida de tus plantas si tomás ciertos recaudos antes y durante los picos de frío.
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Cómo cuidar tus plantas de la ola polar, según los expertos en jardinería
3 de junio 2025 – 07:00
Seguí estos consejos para evitar que las bajas temperaturas afecten la salud de tu jardín durante los meses más fríos.
Lejos de requerir grandes inversiones, los métodos más efectivos para mantenerlas saludables suelen ser sencillos y al alcance de cualquiera. Con pequeños ajustes en la ubicación, el riego y la protección térmica, es posible ayudar a que las plantas atraviesen el invierno sin daños.
Plantas
Trucos para proteger tus plantas del frío
Para las especies que están dentro de la casa o en balcones cerrados, es fundamental alejarlas de los puntos donde ingrese aire helado, como marcos de ventanas mal aislados o aberturas que se usan con frecuencia. También conviene evitar que estén demasiado cerca de fuentes de calefacción, ya que el aire seco y caliente puede deshidratarlas con facilidad.
La ubicación ideal es aquella con buena entrada de luz natural, ya que muchas plantas disminuyen su actividad durante el invierno y necesitan toda la iluminación disponible. Además, colocar las macetas sobre una base que las aísle del suelo como madera, cartón o telgopor, ayuda a proteger las raíces del frío directo. Un recurso adicional es poner las macetas pequeñas dentro de otras más grandes.
Pero por el otro lado, las plantas al aire libre requieren un resguardo especial. Si es posible, trasladalas a sectores más protegidos, como contra una pared orientada al norte o debajo de aleros. Esta simple acción crea un microclima más cálido y resguarda del viento. En casos donde no se puedan mover, se recomienda envolver las macetas con mantas o incluso papel de diario para conservar mejor la temperatura del sustrato.
Otra opción muy útil es agrupar varias plantas juntas. Esta disposición permite que el calor se mantenga entre ellas, reduciendo el impacto del frío nocturno. Armar pequeños invernaderos caseros con botellas de plástico también es una solución práctica y económica.
El riego debe ser mínimo durante el invierno. Muchas plantas entran en una fase de reposo y no necesitan tanta hidratación. Solo conviene regar cuando la tierra esté bien seca y preferentemente al mediodía, cuando las temperaturas son más benignas. Evitá hacerlo de noche o con el suelo helado, ya que eso puede dañar las raíces seriamente.
