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hace 2 añosel
El personal de Tránsito y Transporte del municipio de Bariloche continúa realizando exhaustivos controles en la ciudad, incrementándose cada día el número de coches usados para brindar servicios de transporte de pasajeros a través de la plataforma Uber. Ya se han secuestrado un total de doce vehículos y se ha infraccionado a sus conductores.
Un hecho destacado ocurrió este domingo, cuando uno de los conductores se negó a bajarse de su automóvil durante aproximadamente una hora, generando momentos de tensión en el aeropuerto de Bariloche. Finalmente, tras desistir, abandonó el vehículo y se retiró del lugar. Luego de esto, el automóvil fue llevado en grúa hasta el playón municipal.
Testigos confirmaron que el hombre había sido infraccionado el sábado pero se dio a la fuga, quedando en el poder de los inspectores, la licencia de conducir del chofer.
Pero el infracctor no contaba con que el domingo iba a estar en el aeropuerto, la misma empleada que lo había detectado. Por lo tanto, en esta ocasión no pudo escapar y le secuestraron el auto.
Según fuentes consultadas por El Cordillerano, de los doce vehículos retenidos hasta el momento, diez fueron secuestrados en el aeropuerto de Bariloche, uno en la terminal de ómnibus local y el restante en la avenida San Martín. En todos los casos, los vehículos estaban a punto de recoger pasajeros.
En relación a los controles, desde el municipio local han observado una disminución en el uso de la aplicación móvil para solicitar transporte. Según usuarios, cada vez es más difícil conseguir un vehículo a través de la aplicación, por lo que muchos optan por realizar el contacto telefónico directo, luego de obtener el contacto de los conductores.
El pasado 24 de mayo, el intendente Gustavo Gennuso firmó una resolución suspendiendo el funcionamiento de la popular plataforma de transporte en la ciudad por un período de 30 días. El objetivo de esta medida es regular y establecer un marco normativo adecuado para este tipo de servicios en el municipio.
En ese sentido el subsecretario de Tránsito y Transporte local, Daniel Pincheira, destacó en una entrevista con El Cordillerano Radio (FM 93.7) que el valor de la multa impuesta a los conductores infraccionados asciende a $24.750 pesos, además de los costos de acarreo, ya que los vehículos quedan secuestrados en el Playón Municipal para verificar si existen otros pedidos de secuestro o multas pendientes.
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