La iniciativa funciona en Bariloche desde 2018, pero se originó en La Plata en 2013. El volumen reunirá 120 imágenes a todo color, creadas por autores de distintas procedencias, entre ellas, esta ciudad.
Está en etapa de preventa el libro que celebrará 10 años de Creadores de Imágenes, experiencia que funciona desde 2018 en Bariloche a través del impulso de Ailén Herradón. En su versión editorial, la iniciativa “funciona como una plataforma de publicaciones para creadores, tanto en formato libro como fanzine y con producciones individuales y colectivas”, le dijo la realizadora audiovisual a El Cordillerano.
Quizás se imponga hacer un tanto de historia. “Creadores de Imágenes (CDI) nació en La Plata en 2013, como un pequeño taller autogestionado que se inició desde la necesidad y el deseo de organizar los espacios que la imaginación afectiva y la creación colectiva precisan”, indicó la coordinadora del capítulo local. Desde el vamos, la apuesta tuvo sello rionegrino, porque dio sus primeros pasos Julia Sbriller, oriunda de Cipolletti.
Nuestra interlocutora nació en Las Coloradas (Neuquén), pero cinco años atrás puso primera en esta ciudad, después de asistir a las experiencias platenses de CDI. En la actualidad, en su faceta de taller, la propuesta funciona con dos grupos que trabajan en Barcaza (Villa Los Coihues), pero no se trata de un asunto meramente barrial. “Después de 10 años de recorrido, cuenta con 18 sedes territoriales en la Argentina, Latinoamérica y Europa, con un equipo de 30 coordinadores y más de 200 creadores activos”, profundizó la directora local.
Entonces, CDI también es una red, “una zona deslocalizada de transmisión, contacto, tráfico de data y estrategias en torno a la creación visual”, resaltó Herradón. “Creyendo que una red, como diagrama de movimientos y conexiones imprevistas, es también un espacio: una arquitectura fluctuante y abierta, dispuesta a encontrar sus formas y deformaciones necesarias”, añadió.
Muestra en Fylgja.
No obstante, “el eje de CDI es el taller anual”, recapituló. “Es un espacio para la investigación y experimentación con imágenes -estáticas y en movimiento- desde la fotografía como campo de estudio”. Funciona a través de “encuentros semanales para navegar por nuestro material y el de los demás, y reflexionar sobre cómo construimos imagen, apuntando a desarrollar una mirada sensible y formada”, definió.
Desde los ámbitos de coordinación, “ofrecemos estrategias para abordar el proceso creativo, entrenar el ojo y acercarse a una poética personal. El programa es abierto y está vinculado con las necesidades que cada proceso creativo requiera. Nos enfocamos en el material de cada une, desde unx y desde lxs compañerxs para nutrirnos entre todxs. La búsqueda creativa no es un hacer solitario: aprender y crear son procesos dialogantes y continuos”, proclamó Ailén.
En este contexto, “CDI es un taller de exploración y acompañamiento para artistas visuales y fotógrafxs”, pero también “un colectivo de artistas en movimiento y una galería a cielo abierto”. A la vez que se desarrolla “un programa de taller anual que incluye becadxs”, se propone “una educación no formal que, desde una práctica autogestionada y mutante, busca sostener el espíritu de taller en su doble sentido: experiencia de aprendizaje y creación colaborativa”.
Hasta el momento, la faceta editorial de CDI generó cuatro libros en su haber: “Frenesí” (2015), “Deseo” (2016), “Batalla” (2017) y “Libro Arcoíris” (2022). El que viene -desde ya un fotolibro- será editado por el sello Chaco. La información dice que “las primeras preventas, además del precio especial, se llevan de regalo el mazo exclusivo de 50 cartas-oráculo para el desbloqueo creativo”. Y aquí hace falta otra explicación.
Se trata de “mazos inspirados por las Estrategias Oblicuas de Brian Eno y Peter Schmidt”, introdujo la realizadora. “Desde CDI construimos colectivamente y en red nuestros propios mazos: Estrategias Creadoras en 2019 y Preguntas Creadoras en 2020. Cada uno contiene 130 cartas y cada carta esconde el mensaje de une creadxr”, destalló. “En ellas aparecen el azar y la pregunta para acompañar los procesos creativos”, entonces, es “un oráculo a muchas voces”.
En cuanto al libro, “contiene 120 imágenes a todo color hechas por autores de todo el mundo. Esta publicación irradia un aura especial: se cumplen 10 años de la fundación de Creadores de Imágenes. Sus páginas, curadas por el lúcido y amoroso criterio de Chaco, son una selección reimaginada del gran prisma en movimiento en que se ha convertido CDI”. Para compras: link en bio de @chacoeditorial y @creadoresdeimagenes
Para cerrar -esta reseña de El Cordillerano- sumemos que Ailén es licenciada en Artes Audiovisuales por la Universidad Nacional de La Plata y que se caracteriza por dirigir y producir proyectos “que incluyen una población de artistas y no artistas”. De hecho, filmó “Mawiza ñi pewma” (2014), que ganó un premio en México. Más recientemente, hizo otro tanto con la serie “Inchiñ” (2022), producciones ambas que se pueden ver en Cine.ar, entre otros logros. De Las Coloradas, a alimentar la caldera de Creadores de Imágenes en Bariloche.