Policiales y Judiciales
Crimen de Bargiela, el campeón de jiu jitsu: el STJ rechazó el recurso de revisión y confirmó las condenas
El caso por el homicidio de Facundo Bargiela, que conmovió a la comunidad por la traición y brutalidad del crimen, cerró una etapa: el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro rechazó el recurso de revisión presentado por la defensa de los condenados y confirmó las penas impuestas a los tres responsables.
El fallo ratifica las condenas dictadas en junio de 2024 por el tribunal de juicio integrado por los jueces Romina Martini, Sergio Pichetto y Marcelo Álvarez Melinger, quienes habían condenado a Jonathan Rabinovici a 20 años de prisión, Julio Argentino Torres a 15 años y Santiago Figueroa a 10 años, todos por su participación en el homicidio agravado de Bargiela.
La investigación encabezada por la fiscala jefa Betiana Cendón, junto al fiscal César Lanfranchi, logró probar que se trató de un crimen premeditado y con traición. Rabinovici, considerado no solo amigo sino casi un hermano de la víctima, fue señalado como el autor intelectual y material del asesinato. Según la fiscalía, utilizó el vínculo de confianza para atraer a Bargiela a un lugar aislado, donde se produjo el homicidio.
Torres, por su parte, fue calificado como partícipe necesario: tuvo una colaboración activa tanto en la planificación como en el momento del hecho. Figueroa, el más joven del grupo (19 años al momento del crimen), recibió una pena menor, aunque su rol fue igualmente clave en la ejecución del plan.
El hecho ocurrió en los primeros días del mes de abril de 2024, luego de que Bargiela desapareciera tras ir al encuentro de sus amigos luego de recibir un llamado telefónico. El deportista fue asesinado “a traición”, sorprendido desde la parte trasera del vehículo en el que viajaba como acompañante del conductor. Le dispararon sin que pudiera defenderse.
La autopsia determinó que fue asesinado de un tiro en la nuca, ligeramente, hacia la izquierda. “El proyectil ingresó por la región occipital izquierda con orificio de salida en zona orbital derecha”, detalló el funcionario.
De acuerdo a la acusación, el imputado y los tres condenados por el hecho se encontraron en la esquina de Quaglia y 12 de Octubre, en pleno centro de la ciudad. Allí, el campeón de Jiu-Jitsu abordó un Chevrolet Onix blanco y ocupó el asiento del acompañante. Desde ese lugar se trasladaron hasta la zona del barrio Ñireco, en donde subió a la parte trasera del vehículo un cuarto cómplice que aún no fue identificado, pero que es buscado por la Policía provincial.
Desde allí, se dirigieron a la zona de Esandi y la ruta de Circunvalación, en donde la víctima fue asesinada. El cuerpo de Bargiela fue encontrado días después muy cerca de la estación transformadora de La Paloma, perteneciente a la empresa EDERSA, de distribución y comercialización de energía eléctrica en la Provincia de Río Negro.
“Actuando en convergencia intencional y acuerdo de voluntades, atacaron a Bargiela de manera sorpresiva mediante golpes en diversas partes del cuerpo, tras lo cual quien había abordado en última instancia el vehículo le efectuó un disparo con un arma de fuego, por la espalda, actuando sobre seguro y sin darle a Bargiela posibilidad alguna de defenderse”, relató la fiscalía.
Para llegar a esa conclusión, los investigadores se basaron no sólo en la autopsia, sino en el relevamiento de cámaras de seguridad privadas y públicas realizadas por el Área Judicial de Investigaciones, informes de Oitel y policiales respecto del impacto de comunicaciones en las antenas de los teléfonos celulares.
El cadáver fue descubierto a partir del aviso de dos personas que se estaban recolectando rosa mosqueta en la zona, quienes visualizaron el cuerpo e hicieron un llamado a las autoridades. Al arribar lugar, los policías constataron que se trataba del deportista de quien se desconocía su paradero desde el pasado domingo.
Además, la causa principal se entrelaza con otra investigación paralela por asociación ilícita, donde se analizan posibles delitos económicos y vínculos entre los imputados y otras personas aún bajo sospecha.
El fallo del Superior Tribunal de Justicia despeja cualquier duda procesal sobre la sentencia. En su resolución, los jueces del máximo órgano judicial de la provincia consideraron que no existían elementos nuevos que justificaran la revisión del fallo ni errores que vulneraran el derecho a defensa o el debido proceso.