Aunque todavía faltan varios meses y en Núñez todas las miradas están puestas en la Libertadores, la expectativa por el Mundial de Clubes 2025 es especial. Tal es así que los refuerzos de elite que llegaron con Marcelo Gallardo le apuntan a la Copa y también a estar a la altura del certamen que comenzará en junio de 2025 y que la FIFA ya empezó a palpitar con artículos especiales sobre los diferentes clubes. Y además de incluir a Franco Mastantuono entre las promesas a seguir y de resaltar a Miguel Borja como la estrella del equipo, también armaron un top cinco con los ídolos más grandes en la historia de River.

En el análisis global, la FIFA resalta que “River renovó sus esperanzas con el retorno de Gallardo” y que rubricó la clasificación durante el ciclo de Martín Demichelis. Además, destaca las incorporaciones de los campeones del mundo (Acuña y Pezzella) que se sumaron a Franco Armani para formar “el tridente de mundialistas” y agrega que Fabricio Bustos y Maxi Meza “apuntalaron a una formación que se ilusiona con ganar su quinta Copa Libertadores” y que tiene “sueños reconstruidos” de la mano de MG.

También, en medio de las estadísticas que le permitieron sacar el boleto al MdC, en el que se perfila como “un hueso duro de roer”, y datos históricos, aparece un listado con un quinteto de leyendas del club: el propio Marcelo Gallardo, Ángel Labruna, Norberto Alonso, Amadeo Carrizo y Enzo Francescoli.

El actual entrenador es el primero en aparecer en el ranking: “Primero como jugador, ahora como técnico, el Muñeco es uno de los máximos referentes del Millonario. Gallardo moldeó la identidad moderna de River, una campaña por la cual los hinchas y el club decidieron construir una estatua en su honor que descansa en la puerta del estadio Monumental. Surgido de las Inferiores, brilló como jugador y levantó la Libertadores de 1996 además de una serie de campeonatos. Después de tres etapas vistiendo la Banda, fue el cerebro de la época dorada como entrenador. Gallardo reconfiguró la genética del Millonario, encargándose no solo del primer equipo sino también de cuestiones estructurales del club.

El histórico 10 de River también fue destacado: “El Beto Alonso es uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol argentino, integrante de la trilogía de número 10 que definieron una época en el fútbol junto a Diego Maradona y Ricardo Bochini. Campeón del mundo con la Selección Argentina en 1978, Alonso vistió la camiseta Millonaria en tres etapas diferentes, interrumpidas por sus etapas en el Olympique de Marsella y de Vélez. Alrededor de su figura, River construyó a una formación memorable que conquistó la primera Copa Libertadores de su historia y la Intercontinental del mismo año”.

Luego, aparece el histórico arquero que marcó una época tanto en River como en el fútbol argentino: “El jugador con más presencias en la historia del club es también considerado uno de los mejores arqueros de la historia del fútbol. Tarzán, como lo apodaban, defendió el arco millonario entre 1945 y 1968. Innovador y adelantado a su tiempo, dejó un sello indeleble en la historia no solo de River sino también del fútbol argentino. Antes de la transformación definitiva del arquero como líbero, Carrizo fue pionero al iniciar las jugadas de peligro de su equipo y cumpliendo una función fuera del área tanto para participar de la elaboración como para desbaratar situaciones de gol del rival”.

Angelito no podía faltar en esta selecta nómina: “Considerado como uno de los mejores futbolistas en la historia de la Argentina, el wing izquierdo es el máximo artillero en la historia del club con 317 goles en 545 encuentros. Dueño de una estatua en las adyacencias del Monumental, Angelito fue una de las piezas elementales de la inolvidable Máquina junto a Juan Carlos Muñóz, Charro Moreno, Adolfo Pedernera y Félix Loustau. Surgido de las inferiores, acumuló una insondable cantidad de títulos”.

Por último, el Príncipe tuvo su reconocimiento: “El uruguayo, quien hoy ocupa el cargo de director deportivo del elenco de Núñez, es uno de los grandes en la historia de River. Nacido en la ciudad uruguaya de Montevideo, completó dos etapas en el elenco de Buenos Aires y conquistó la Copa Libertadores de América en 1996. El formidable delantero charrúa hizo historia con la Banda, convirtiéndose en uno de los mayores referentes del fútbol internacional y llegando a ser idolatrado por estrellas mundiales como Zinedine Zidane, quien llamó a su hijo Enzo en honor a Francescoli”.

La espera se hizo larga, pero ya faltan sólo un puñado de horas para ver a Franco Colapinto otra vez en acción en la Fórmula 1. Y para ir palpitando lo que será el Gran Premio de Azerbaiyán, la primera experiencia del argentino en el exigente trazado de Bakú, el piloto de Williams participó de la ronda de conferencias programadas para este jueves y, entre otras cosas, contó cómo llega a su segunda carrera y, claro, no pudo evitar hablar de sus fans.

“Siempre me gusta interactuar con la gente. Los fanáticos son increíbles y, en cierta forma, me han ayudado a llegar donde estoy ahora. Así que siempre es lindo interactuar con ellos. No muchos pilotos lo hacen y siempre es bueno tener algo de tiempo para eso”, contó Franco ante una pregunta casi obligada en la conferencia, después del revuelo que generaron los fanáticos del argentino en Monza.

Además, con respecto al ida y vuelta con los fans en redes sociales, algo que Colapinto maneja con soltura, reconoció su intención de alejarse un poco, sobre todo los fines de semana de carrera: “Antes lo hacía mucho, pero ya estoy dejando un poco de lado las redes sociales y será mi community manager quien siga con eso para poder centrarme los fines de semana de carrera”.

“Pero es increíble tener tanto apoyo por parte de tu país. Nunca elegís cuándo llegar a la Fórmula 1, pero por suerte estoy acá, lo estoy disfrutando mucho y estoy tratando de extraer el máximo”, confesó el piloto argentino.

Colapinto, quien ya estuvo recorriendo el circuito a pie este mismo jueves, saldrá por primera vez a pista el viernes, a las 6.30 de Argentina, en la primera práctica libre. Con las sensaciones con respecto al auto un poco más claras, luego de lo que fue su primera experiencia en el Gran Premio de Italia, ahora Franco tendrá un nuevo desafío: una pista completamente nueva para él.

Con respecto a qué espera de su debut en Bakú, explicó: “El objetivo es ir avanzando poco a poco. Creo que es muy parecido a Monza, porque en Monza no conocía el coche, pero ahora no conozco la pista, así que me queda una cosa por aprender”.

En la misma línea, agregó: “Oli (Bearman, quien reemplazará este fin de semana al suspendido Kevin Magnussen en Haas) dijo antes que tres entrenamientos libres son más que suficiente para aprender la pista. No estuve en muchos circuitos callejeros, pero espero haber hecho suficiente preparación en el simulador y haber trabajado muy duro con el equipo para entrar rápido en ritmo”.

“La realidad es que no conozco las próximas siete pistas, y sabemos que va a ser duro. Pero era parte del riesgo y también va a ser una gran experiencia conocer estas últimas siete carreras del año en las que no he corrido. Así que sé que va a ser duro, pero estoy trabajando mucho y haciendo mucha preparación para estar listo”.

“Por supuesto, creo que tenemos un coche muy bueno para poder sumar puntos, y voy a intentar hacerlo lo mejor que pueda. Creo que hay que ir paso a paso, sesión a sesión, y ver dónde acabamos”, indicó.

Consultado sobre cómo lo habían recibido sus colegas en su llegada a la Fórmula 1, Franco sorprendió al revelar quién le mandó su primer mensaje cuando se confirmó su desembarco en Williams: “El primer mensaje fue de Lando (Norris), fue cuando me anunciaron. Acababa de ganar la carrera (el GP de Países Bajos). Fue muy bueno y muy educado”.

“Luego hablé con los chicos, con Charles (Leclerc), Lando y Alex (Albon). Me estaban dando consejos y cosas para estar atento”, continuó el pilarense.

Y completó: “Siempre me dijeron que era muy difícil manejar el auto, la aceleración que tiene, la potencia, las frenadas tardías, las curvas… Podés llegar a imaginarlo, pero hasta que no manejás no te das cuenta cómo es realmente. Hubo muchos pilotos que han sido buenos y me han ayudado, es una gran comunidad la que tenemos en la F1″.

Tras el Gran Premio de Monza, Franco resaltó los dolores físicos que enfrentó durante sus primeras 53 vueltas arriba de un Fórmula 1. Y, como uno de los principales puntos a corregir de cara al Gran Premio de Azerbaiyán, señaló a su asiento, el gran responsable de esos dolores.

Incluso, el mismísimo Fernando Alonso le recomendó solucionar ese inconveniente cuanto antes, porque no todos los circuitos permiten correr durante más de 50 vueltas con ese dolor. De hecho, el español señaló puntualmente a los trazados callejeros, porque dan menos descanso del que por ahí puede dar la pista de Monza.

“¡Necesito hacer cambios en mi cuerpo!”, se río Franco en conferencia, antes de puntualizar en las modificaciones que se realizaron en estas dos semanas. “El auto es muy rígido, al igual que el asiento. No creo que esté completamente modelado según mi cuerpo, pero hemos hecho algunos cambios”.

Además, contó: “Pero mi cuello reaccionó muy bien, lo que significa que hicimos un buen trabajo en el entrenamiento y el asiento luce fantástico, así que son muy buenas noticias”.

La carta-bomba de salida de Pol Fernández terminó por blanquear una situación que en Boca se vivía puertas para adentro y en susurros. La dirigencia está caliente con el mediocampista por su intención, ahora blanqueada, de irse del club, justo en el momento de mejor rendimiento, al punto en que, con Cavani lesionado, es el futbolista más importante del equipo, por nivel y liderazgo.

Cerca de Román y del Consejo sangran por la herida: esperaban otra actitud del jugador después de que el club hiciera borrón y cuenta nueva por su traumática salida en 2020, cuando el mediocampista decidió no continuar, pese a que Boca había arreglado otro préstamo con Cruz Azul, porque consideró que debía renegociar un nuevo contrato y Boca argumentaba que seguía vigente el que firmó al llegar.

Como fuere, el Consejo siente que le abrió las puertas, lo bancó cuando la gente lo insultaba y ahora les paga con ingratitud. Porque, además, el mismo club que colgó a Cristian Pavón, exilió a Agustín Rossi y, mucho más acá en el tiempo, tiene freezado a Nicolás Valentini por una situación idéntica, con Pol actuó de manera totalmente diferente, al punto de que es uno de los capitanes del equipo (de hecho, lo fue en el último partido ante Talleres).

“En virtud de varias versiones que están circulando en los medios acerca de mi futuro, y en pos de dejar en claro cualquier situación, quiero manifestar que mi compromiso con el Club Atlético Boca Juniors sigue intacto hasta el 31/12 que es cuando finaliza mi contrato”, comenzó diciendo Pol en su anuncio de salida.

“También debo aclarar que en mayo le informé al Consejo de Fútbol que había decidido no renovar el contrato, a pesar de los ofrecimientos del club, ratificándoles mi total compromiso con el equipo hasta el fin de la temporada y brindándoles el tiempo necesario para que puedan trabajar en el armado del plantel de 2025. Esta decisión la volví a comunicar en agosto y también informé que posiblemente mi destino sería fuera del país, puntualmente en Brasil, cuando decida dónde el club será notificado”, amplió Pol.

El jugador se vio obligado a blanquear algo que en Boca ya se sabía, pero que, ¿fingiendo demencia? intentaron ocultar, mientras en público, como Chicho Serna antes del partido con Talleres, buscaban presionarlo. “Con Pol tenemos las cosas demasiadas claras. Dos veces lo fuimos a buscar y lo trajimos, es muy importante para nosotros. Hace poco me dijeron que tenía todo arreglado con San Pablo, ahora con Fortaleza… Nosotros no tenemos conocimiento”, dijo el integrante del Consejo. Esa situación “indefinida” (que al parece no lo era tanto) era el paraguas que tenía la dirigencia para seguir sosteniendo la regularidad de Pol Fernández en el primer equipo.

Esto, claramente, deja expuesto a Juan Román Riquelme y a su Consejo, porque ya no tendrá margen de maniobra, sobre todo porque tiene un caso idéntico al citado Valentini…

“Con esto quiero dejar en claro que siempre fui transparente con las personas y el club que depositó su confianza en mí, pero también para reforzar que siempre me maneje de frente y sin intermediarios en mis comunicaciones, evitando generar dudas con respecto a mi renovación”, una frase que, sin dudas, apunta al corazón de la maniobra del Consejo y acelera la descomposición de la relación.

El momento, además, no podía ser menos oportuno. Con Racing y River, nada menos, como próximos compromisos, la ausencia de Pol sería doblemente dolorosa, y es otro golpe más para una dirigencia que ya perdió demasiados jugadores por no haber podido (o sabido) encaminar un conflicto contractual.

Ahora, toda la presión caerá sobre los hombros de Diego Martínez, que quedará en el centro del conflicto. La práctica de hoy será decisiva para ver si de las oficina bajó alguna decisión, o habrá un oportuno silenzio stampa hasta después de estos dos partidos decisivos. Por lo pronto, el conflicto está servido. Gracias Pol avisar…