La Casa Rosada volvió a establecer diferencias con la Vicepresidencia tras el anuncio de Victoria Villarruel de reabrir casos judiciales contra grupos guerrilleros. Desde el Gobierno, aseguran que esta medida no es parte de la agenda del presidente Javier Milei. Pese a ello, Manuel Adorni, vocero presidencial, destacó que la vicepresidenta está impulsando una “lucha desde hace años para que se juzgue a todas las partes y está muy bien que así sea.”
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En conferencia de prensa, Adorni comentó: “Todos conocemos la lucha de la doctora Villarruel por la justicia para todas las partes implicadas. Es un tema de su agenda, su bandera principal, pero no es una prioridad actual para el Presidente de la Nación.” La declaración se produjo en respuesta a la promesa de la presidenta del Senado, hecha durante un acto en homenaje a las víctimas del terrorismo.
Ayer, la vicepresidenta se comprometió a reabrir “todas las causas de terrorismo para que la Justicia haga lo que debió hacer hace más de 20 años.” En su discurso, sostuvo que “todos los montoneros deben estar presos por ensangrentar nuestra nación. Solo con los asesinos en las cárceles podremos, en unidad, levantar a nuestra amada Argentina.” Este mensaje resonó tras el escándalo por la visita de legisladores de La Libertad Avanza a represores presos en Ezeiza.
Villarruel reflexionó sobre el homenaje calificándolo como “impensado hace 20 años” y expresó su orgullo por desafiar “la historia oficial.” Además, cargó contra el kirchnerismo, acusándolo de “enriquecerse con el dolor de los argentinos”. “Denunciar los crímenes de los protegidos por Néstor y Cristina Kirchner era peligroso. Fuimos como David contra Goliat, enfrentándonos al poder estatal que garantizaba su impunidad”, señaló.
