Los 70 minutos que Kylian Mbappé disputó con la camiseta del Real Madrid este sábado ante el Villarreal terminaron por enrarecer el ambiente de la hinchada francesa con su capitán y su gente se pregunta: ¿Cómo es posible que haya jugado en su club si no fue convocado por Francia por problemas físicos?

Los medios franceses han intentado responder a la cuestión, oscilando entre culpar a los Merengues por su falta de colaboración hasta a apuntar al propio jugador, cuya motivación para representar a Les Bleus en este momento la han puesto en tela de juicio.

Lesionado en el bíceps femoral el pasado 24 de septiembre ante el Alavés y con un pronóstico de recuperación de unas tres semanas, Kyky recortó los plazos y, tras perderse el derby ante el Atlético de Madrid (1-1), reapareció ocho días más tarde en la derrota de Champions ante el Lille (1-0), aunque en el tramo final del encuentro. Un día después, el 3 de octubre, Didier Deschamps difundía la lista para los partidos de la Liga de Naciones ante Israel (10 de octubre) y Bélgica (14 de octubre) y su estrella no figuraba entre los convocados. “Tiene un problema que no es grave, necesita cuidados para que se recupere bien”, justificó ante los periodistas el siempre diplomático Deschamps. Pero…

Las dudas se dispararon cuando el Real Madrid anunció la convocatoria del capitán francés para el duelo liguero ante el Villarreal y se agravaron al ver a un jugador que supuestamente “necesita cuidados” disputando en el Santiago Bernabéu 70 minutos como titular.

“Kylian Mbappé estropea su imagen y pone en un aprieto al seleccionador”, se indigna L’Équipe. Otros medios, como Le Parisien atribuyen el affaire a la intransigencia del Real Madrid con los internacionales. No obstante, la prensa coincide en que Mbappé no está ahora 100 % motivado para representar a su país, del que es el tercer máximo goleador histórico.

El campeón del mundo de 2018 y subcampeón en 2022 es, de lejos, el principal peso pesado de Les Bleus, tras la reciente retirada internacional de Antoine Griezmann. El Colchonero se une a las despedidas de Hugo Lloris (2023), Olivier Giroud (2024) y Raphäel Varane (2023). Paul Pogba, otra de las columnas centrales de los campeones de 2018, tampoco está, aunque podría reaparecer en 2025, después de que su sanción por dopaje haya sido rebajada.

La concentración en Clairefontaine que empieza este lunes podría haber sido la que consolidase el liderazgo de Mbappé en la selección. Sin embargo, será un ambiente enrarecido el que reinará. Para comprender el por qué de este nuevo incidente basta con repasar la relación del jugador de Bondy con Francia.

En 2021 estuvo a punto de abandonarla cuando recibió insultos racistas por haber fallado un penal ante Suiza que supuso la eliminación gala en los octavos de la Eurocopa. También tuvo mediáticos roces con jugadores como Giroud, quien se quejó públicamente porque Mbappé no le pasaba la pelota.

Y este comienzo de temporada irritó a la hinchada y provocó las críticas de leyendas del fútbol francés, como Bixente Lizarazu, por haber dicho que le era indiferente el recibimiento que, ante Italia, le fuese a dar el público del Parque de los Príncipes, estadio en el que jugó las últimas siete temporadas.

Otro de los que se han opinado y, no para elogiar, ha sido Patrice Evra, él mismo antiguo capitán de les Bleus. “El problema es vuestro (la prensa), es cierto que (Mbappé) ha ganado la Copa del Mundo, pero, con todos los respetos, no le llega a los tobillos de Benzema“, comentó recientemente en un programa de radio.

Ya es un naming instalado en el fútbol argentino. Luego de dirigir en todas las categorías durante 13 años, la dupla Orsi-Gómez se implantó en la memoria del futbolera cumpliendo los principales parámetros del branding publicitario: identidad, coherencia, propuesta de valor y conexión emocional. “La gente se acuerda mucho del concepto ´la dupla´, igual todavía nos pasa que nos siguen confundiendo, ja”, comenta, entre risas, Favio Orsi. Antes de recibir al River de Gallardo, el técnico de Platense, analizó a fondo con Olé su presente en un “club especial” y cuenta cómo se prepara para enfrentar a “uno de los mejores equipos del fútbol argentino”, un rival que a nivel internacional “con Gallardo, se ha hecho fuertísimo en los mano a mano” y que es “gran candidato a ganar la Libertadores”.

-Con Godoy Cruz en el Monumental ya le ganaste al River de Gallardo: ¿Hay un secreto?

-No hay ningún secreto, trabajamos cada partido que tenemos que enfrentar entendiendo la magnitud del rival al cual enfrentamos y la diferencia de jerarquía que hay. Son partidos que uno necesita estar al cien en intensidad para vivirlo y sentirlo en lo táctico y estratégico. Hay que estar concentrados y ver cómo está el rival, porque si el rival está en la misma sintonía ya es un partido muy difícil. Desde ya que vamos a enfrentar a mejor o a uno de los mejores equipos del fútbol argentino, sin lugar a dudas.

-¿La mano de Gallardo tiene que ver con este presente?

-El regreso de Gallardo le hizo bien a River y al fútbol argentino, lo jerarquizó. Es un cuerpo técnico con el que tenemos buena relación…

-Claro, compartiste con Biscay y Buján en la categoría 74 de las Inferiores de River…

-Fueron muchos años juntos compartiendo con los mismos sueños y deseos. Una edad donde cada uno intentaba cumplir el sueño de jugar en un club como River y ver compañeros solidarios en el día a día. Hicimos todas las Inferiores con una camada de chicos con las que hoy en día nos seguimos cruzando. Es más, hace poco hicimos un amistoso en el Monumental…

-En base a ese partido de práctica: ¿Cuáles te parecen que son los puntos más peligrosos de River?

-Todos. Hay un montón de puntos. En el análisis previo de un partido tenés que trabajar desde la jerarquía técnica a la cual te enfrentar para, en base a eso, bajar estímulos técnicos y tácticos durante la semana para estar más preparados para este tipos de partidos.

-Sin embargo, River llega con un Borja en sequía: ¿Es una ventaja?

-No. Un jugador de la calidad de Borja, Tanto futbolística como humana: tuve una experiencia personal con él que me demostró que tiene calidad como ser humano. No es una ventaja. Al contrario, la ventaja la tiene Gallardo por contar con ese tipo de jugador.

-¿Cuál fue la experiencia personal que viviste con Borja?

-Hubo una situación que habíamos vivido al final de un partido con Atlético Tucumán al final del año pasado y, cuando nos volvimos a enfrentar a principios de 2024, vino a hablarme y demostró ser una persona de mucha calidad humana.

-¿Cómo ves a River en esta Copa?

-Está en una instancia definitoria, la final es a un partido único y River con Gallardo se ha hecho un rival fuertísimo en los mano a mano. Tiene una jerarquía impresionante con jugadores de Selección y campeones del mundo.

-¿Tiene chances de ser campeón?

-Sí, por la jerarquía individual, colectiva y con la conducción de Gallardo, claramente tiene muchas chances de ganar la Libertadores.

-¿Cómo te encuentra este presente en el Calamar?

-Bien, muy bien. Tanto Sergio como yo salimos de acá y siempre, por diferentes circunstancias, no terminamos dando con el club. Surgió justo después de haber renunciado en Atlético Tucumán y a los pocos días vino el llamado de Platense. Por nuestro pasado es un club especial y ya hace varios meses que estamos trabajando y desarrollándose en un lugar que queremos.

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-Después de tantos años trabajando con Sergio: ¿Los siguen confundiendo?

-Sí, ja. Sigue pasando. Cada vez menos, pero pasa. Más que nada en la rapidez del saludo.

-Sin embargo, “la dupla” ya es un naming instalado en el fútbol argentino…

-Es verdad. Creo que más que nuestro apellido, somos la dupla y desde ahí nos denominan. Es así, hace muchos años trabajamos en conjunto y es una característica de formato de nuestro cuerpo técnico.

Si bien tanto Favio como Sergio hicieron Inferiores en Platense, el fútbol los reunió luego de que ambos hayan colgado los botines. En 2012, un Orsi de 38 años abrazó la compañía de un Gómez que, a sus 31, empezaba el camino como entrenador. Y caminaron juntos a la par por todas las categorías del fútbol argentino: debutaron en Fénix, pasaron por Deportivo Español, Flandria, Almagro, San Martín de Tucumán y Ferro hasta que, en el 2022, llegó la gran oportunidad de comandar Godoy Cruz y debutar en la máxima categoría del fútbol argentino. Ya son dos años en la élite, con paso por los bancos del Tomba, de Atlético Tucumán y Platense. “Nosotros pasamos por todas las categorías del fútbol argentino, sin saltarnos ningún escalón. Cuando empezamos a dirigir, los técnicos de una categoría eran de esa categoría y para pasar a una superior tenían que ascender. Hoy no se da así, por suerte para los técnicos. Nosotros para llegar al Nacional B tuvimos un recorrido duro y difícil… Pero hermoso”, recuerda y se emociona, Orsi.

-¿Qué encontraste en Sergio para arroparlo de esa manera?

-Nos ayudamos juntos y de eso se trata. Estamos convencidos de que lo que nos trajo hasta acá es esa situación de complementarnos y ayudarnos. Tratamos de empujar juntos.

-¿Hay cierta similitud de pareja?

-Ja, creo que es una relación de dos personas que sienten y piensan el fútbol de la misma manera y que se respetan y se quieren mucho.

-Pero ya no podrías volver a trabajar solo…

-Y, ya son muchos años trabajando de esta manera. Nosotros no tenemos problemas de egos, de flashes, de quién está más parado o menos parado, de quién habla más y quién habla menos. Así lo llevamos en el día a día y hace ya 12 años que estamos en esto… No tengo la cuenta exacta, pero llevamos más de 500 partidos dirigidos juntos. Un montón.