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Política y Economía

El secretario general de ATE pidió juicio político para la Corte Suprema en Plaza de Mayo

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Rodolfo Aguiar disparó contra los jueces que dejaron firme la condena contra la expresidenta.

Rodolfo Aguiar, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), planteó una demanda contundente: el juicio político a la Corte Suprema de Justicia. Es la segunda vez en menos de un año que las calles del país se cubren de manifestantes que se oponen a las decisiones judiciales, en esta ocasión con la Plaza de Mayo como epicentro de una multitudinaria convocatoria a favor de la expresidenta Cristina Kirchner.

La marcha, que contó con la participación de diversas franjas del peronismo, tuvo como trasfondo el reciente fallo de la Corte Suprema que ratificó la condena de la expresidenta a seis años de prisión e inhabilitación permanente para ocupar cargos públicos en relación al caso Vialidad. Aguiar, desde el escenario principal, no ahorró críticas hacia el máximo tribunal del país, manifestando que esta entidad se configura como una carga sobredimensionada de poder en detrimento de una democracia plena.

Durante su discurso, Aguiar no solo cuestionó el fallo reciente, sino que además trajo a la memoria pública el fallo 2×1, un controvertido episodio cuando la Corte estuvo en el centro de la tormenta mediática tras reducir penas a genocidas. “Luchamos por una justicia en serio para nuestra nación, no una que sirva a intereses mezquinos,” afirmó Aguiar enérgicamente.

Otro ángulo poderosamente expuesto en su intervención fue la denuncia sobre la demora del Supremo en definir la validez del decreto 70/2023. Este decreto, enclavado en medio de intensas disputas políticas y considerado por muchos como inconstitucional, pretendería, a los ojos de Aguiar y su gremio, minar derechos ciudadanos esenciales.

Mientras tanto, el ambiente de la Plaza de Mayo se cargaba de una emoción especial al trascender la pantalla y llegar hasta el escenario un mensaje grabado de la misma Cristina Kirchner. Con un reclamo que se extiende más allá de lo político hacia lo emocional, hizo un llamado explícito a la unidad: “Como aquella plaza hirviente del 9 de diciembre”, reiteraba a decenas de miles de sus seguidores. La arenga culminó en una conexión en vivo, un momento íntimo pero simultáneamente potente, reflejo de la arraigada conexión de la líder con su base. Ella cerró su breve aparición con palabras que renacieron en las voces de cada presente: “Los abrazo con mi corazón.”

Con el eco de esas palabras, los manifestantes desconcentraron cerca de las 16:30 horas, no antes de haber transformado una tarde más en un memorable episodio de resistencia y fervor político.