La presidencia de Francia oficializó la visita.
El presidente Emmanuel Macron se prepara para llevar a cabo una gira significativa en América Latina, haciendo una parada destacada en Buenos Aires antes de asistir a la cumbre del G20 en Río de Janeiro. Programado para estar en Argentina el 16 y 17 de noviembre, Macron tiene intenciones explícitas de entablar conversaciones relevantes sobre el cambio climático con el recién electo presidente argentino, Javier Milei. Según fuentes de la presidencia francesa, este diálogo será parte de un esfuerzo más amplio para abordar algunos de los desafíos globales más apremiantes en vísperas del encuentro internacional.
La agenda de Macron no se detiene en Argentina. Posteriormente, el mandatario se dirigirá a Chile, entre el 20 y 21 de noviembre, en un viaje que el Palacio del Elíseo describe como un nuevo capítulo en las relaciones entre Francia y América Latina. Este enfoque renovado busca fortalecer vínculos no solo con Argentina sino también con otras naciones del continente. Durante su estancia en Buenos Aires, además de abordar el tema climático, se espera que las discusiones entre Macron y Milei se centren en la cooperación estratégica en sectores económicos vitales, resaltando la importancia de un lazo histórico que se remonta a relaciones bilaterales de largo plazo.
Chile representa un frente crucial en la estrategia latinoamericana de Macron. La confirmación de su visita a Santiago precede a la de Buenos Aires y refleja la buena afinidad del presidente francés con su similar chileno, Gabriel Boric. Ambos líderes comparten una visión alineada sobre asuntos multilaterales, especialmente en áreas relacionadas con la protección de océanos y la biodiversidad, señalando un eje de interés común que promete futuras colaboraciones.
El viaje de Macron a la región busca también solidificar alianzas en variados frentes. La presidencia gala subraya que habrá un enfoque particular en temas como la transición energética, la inteligencia artificial y la expansión de intercambios culturales y académicos. Estos elementos resaltan una estrategia holística para expandir la influencia francesa en América Latina durante un tiempo donde las dinámicas geopolíticas globales están experimentando significativos cambios.
Emmanuel Macron, durante su primer mandato, no había visitado América Latina bilateralmente, enfocando su actuación diplomática en otras esferas de influencia. La cumbre del G20 en Buenos Aires en 2018 fue la única excepción donde participó en la región. Sin embargo, el segundo mandato parece mostrar una notable apertura hacia estas regiones, propiciada por las recientes coyunturas internacionales, como la guerra en Ucrania, el distanciamiento del bloque ruso y las complejas relaciones tanto con China como con Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump.
