Un hombre que se encontraba bajo investigación judicial por el robo de un auto y la muerte de un joven, y sobre quien recaían una serie de medidas cautelares solicitadas por la Fiscalía, ahora fue imputado por ser coautor de una tentativa de robo a un supermercado de la zona de los kilómetros. Todo en un período menor a cuatro meses.
El protagonista de este relato es Ezequiel González Santos, quien ayer asistió a una audiencia de formulación de cargos luego de excusarse días atrás por encontrarse internado en el hospital. En la ocasión su abogada denunció una golpiza en el calabozo en el que fue alojado y el sangrado de una vieja herida producto de un fuerte choque ocurrido en diciembre del año pasado, el mismo que dio origen a la primera investigación en su contra.
El lunes (20/3) la fiscal jefe Betiana Cendón lo acusó de ser coautor del delito de “robo con escalamiento en grado de tentativa”. El caso al que se refirió es el del 16 de marzo cuando, en plena madrugada, González Santos y Antonio Oyarzún se dirigieron hasta un supermercado ubicado en el kilómetro 4 de la avenida Bustillo. Ambos escalaron un cerco de más de dos metros de altura, forzaron una puerta e intentaron llevarse un cajón con 12 botellas de cerveza. Un aviso a la Policía evitó que lograran su objetivo.
Pero esta vez Cendón, quien en una primera intervención había solicitado una serie de medidas cautelares, requirió ante el juez que González Santos cumpla con un mes de prisión preventiva ya que se comprobó que el hombre no acató la primera orden judicial dictada en enero de este año. Aquella vez se lo había imputado por los delitos de hurto agravado, había robado un Citroën C4 de una cochera, y el homicidio culposo de Leonel Andrés Fassi debido a su conducción “temeraria, imprudente y antirreglamentaria”.
Con este panorama, el juez de garantías Víctor Gangarrosa formuló los cargos contra González Santos y le impuso un mes de prisión preventiva, con modalidad domiciliaria, que deberá cumplir utilizando un dispositivo de rastreo electrónico. Además otorgó dos meses para llevar adelante la investigación penal preparatoria por el segundo hecho imputado.
Los casos
El nombre de Ezequiel González Santos comenzó a tomar lugar en la agenda de los temas policiales y judiciales en diciembre del año pasado. El hecho en cuestión ocurrió entre los días 13 y 14 de diciembre. Es que en la tarde del primer día señalado ingresó en la cochera de un edificio de Mitre al 700 y, sin ejercer ningún acto violento, se apoderó de un Citroën C4 Cactus, paseó por la ciudad y recogió a Leonel Fassi, a quien le habría prometido llevar a su casa.
Sin embargo, a la altura del kilómetro 6,600 de Pioneros, González Santos perdió el control del vehículo y chocó contra un poste del tendido eléctrico. El hombre sufrió fractura expuesta en su pierna izquierda, la misma que le impidió asistir a la audiencia del viernes, mientras que Fassi padeció traumatismo de cráneo grave, con pérdida de conciencia no recuperada, y permaneció internado con asistencia respiratoria en el Hospital Zonal hasta su muerte el día 9 de enero de 2023.
Por ese hecho, durante la formulación de cargos, se le obligó a cumplir con una serie de medidas cautelares: mantener domicilio, concurrir a toda audiencia a la cual sea convocado, prohibición de salida del país y de Bariloche, presentarse una vez por semana ante la Comisaría 27 y la prohibición de acercamiento a menos de 500 metros de los testigos de lo ocurrido aquella noche.
El último hecho es el que ocurrió días atrás. González Santos y Oyarzún intentaron apoderarse de la mercadería de un supermercado que se encuentra frente a la playa del barrio Melipal. Para ello tuvieron que escalar un cerco perimetral de aproximadamente 2,4 metros de altura. El primero de los implicados lo hizo con los 25 puntos de sutura en su pierna producto del choque fatal.
Luego de pasar el cerco, forzaron la puerta trasera del local hasta deformarla e intentaron llevarse un cajón con 12 botellas de cerveza, pero no lograron concretar ese robo ya que los empleados de los comercios de los alrededores advirtieron a la Policía lo que estaba sucediendo.
