El Departamento de Estado de EEUU los ha incluido en la lista de terroristas globales especialmente designados (SDGT) y ha designado a LNFM como organización terrorista extranjera (FTO) desde el pasado 20 de febrero.
El gobierno de los Estados Unidos ha puesto en marcha una intensiva cacería internacional, ofreciendo un considerable incentivo económico por cualquier información confiable que conduzca al paradero de prominentes líderes del mundo del narcotráfico.
Con una recompensa total que asciende hasta los u$s8 millones, las autoridades estadounidenses están enfocadas en capturar a los hermanos Hurtado Olascoaga, considerados los principales cabecillas del cártel mexicano La Nueva Familia Michoacana (LNFM).
La iniciativa, anunciada por Washington, destina hasta u$s5 millones específicamente para localizar y detener a Johnny Hurtado Olascoaga, conocido como “Pez”, y otros u$s3 millones por su hermano José Alfredo Hurtado Olascoaga, alias “Fresa”. Esta medida subraya la importancia que las agencias estadounidenses le están dando a desmantelar el poder de la LNFM, una organización con raíces profundas en el Estado de México y fuertes ramificaciones en territorios como Michoacán y Guerrero.
El cártel LNFM ha sido etiquetado bajo la temida lista de terroristas globales, una designación especial del Departamento de Estado de EEUU para enfrentar con mayor dureza a las amenazas del crimen organizado. Desde que fue declarado como organización terrorista extranjera en febrero pasado, LNFM ha sido objeto de una intensificada persecución legal y financiera. Con el apoyo del Programa de Recompensas contra Narcóticos (NRP), Estados Unidos no escatima recursos en su intención de debilitar las redes que sustentan el tráfico global de drogas.
Las cifras detrás de las actividades ilícitas del cártel resultan alarmantes. De acuerdo con la DEA, La Nueva Familia Michoacana es responsable de mover aproximadamente 36 toneladas métricas de metanfetamina, 12 toneladas métricas de heroína mexicana y cantidades similares de cocaína a los Estados Unidos cada año. Ante esta incesante ola de tráfico, la administración estadounidense ha decidido aplicar mano dura a través de la presión económica, intensificando las sanciones sobre los activos de los detenidos y sus asociados.
Si bien la búsqueda de los hermanos Hurtado es la prioridad, destronar las operaciones de un cartel tan bien organizado solo puede ser posible con una respuesta coordinada y tenaz. Entre las herramientas más eficaces se encuentra el canal directo habilitado por la DEA para que cualquier persona, tanto dentro como fuera de Estados Unidos, pueda aportar información.
