Francis Ford Coppola está demandando al portal Variety y a dos de los editores ejecutivos por difamación por una historia publicada en julio que alegaba que el director se comportó de manera inapropiada y poco profesional en el set de su nueva película Megalopolis.

En documentos judiciales presentados en el Tribunal Superior de California en Los Ángeles el miércoles, los abogados de Coppola dijeron en parte que “cree que la difamación de los acusados, como se describe anteriormente… se hizo con conocimiento de falsedad o con un desprecio imprudente de la verdad”.

“Nada en mis más de 60 años de carrera puede igualar el arduo y, a la vez, artístico viaje de llevar MEGALOPOLIS a la pantalla. Fue una colaboración de cientos de artistas, desde extras hasta estrellas de taquilla, a quienes siempre les mostré el máximo respeto y mi más profunda gratitud”, dijo Coppola en un comunicado el miércoles por la noche.

“Ver cómo nuestros esfuerzos colectivos se ven empañados por informaciones falsas, imprudentes e irresponsables es devastador. No se debe permitir que ninguna publicación, especialmente un medio tradicional de la industria, utilice vídeos subrepticios y fuentes anónimas para obtener su propio beneficio económico”, continúa el comunicado. “Si bien no tengo intención de litigar esto en los medios, defenderé enérgicamente mi reputación y confío en que los tribunales los harán responsables”.

Qué decía el informe de Variety sobre Francis Ford Coppola

La historia publicada en julio que cita fuentes anónimas que dijeron a Variety en parte que después de una escena, Coppola agarró un micrófono y anunció: “Lo siento si me acerco a ti y te beso. Solo debes saber que es solo para mi placer“.

El artículo también hace referencia a dos vídeos publicados en Internet que supuestamente muestran al legendario director intentando besar a jóvenes extras femeninas en el set de Megalopolis. Según se informa, los vídeos fueron grabados por un ex miembro del equipo de rodaje de la película y parecen coincidir con una historia anterior de The Guardian en la que fuentes acusaron a Coppola de intentar besar a “algunas de las extras femeninas en topless y escasamente vestidas” y de decirles que “estaba ‘intentando ponerlas de humor'”.

En los documentos presentados ante el tribunal, los abogados de Coppola afirmaron que antes de presentar la demanda, “aportó pruebas a Variety de que las acusaciones anteriores eran falsas y Coppola solicitó que se retractaran de las acusaciones. Variety se negó y reafirmó su postura. Repitió las mismas acusaciones y, de ese modo, enfatizó su malicia hacia Coppola. Para limpiar su nombre y obtener una determinación pública de la falsedad de las acusaciones de Variety, Coppola ha presentado este caso”.

La supuesta difamación, continúa el expediente, “se realizó intencionalmente o con un desprecio consciente de los derechos de Coppola y con la intención de vejarlo, herirlo o molestarlo de manera tal que constituya malicia, fraude u opresión, lo que le da derecho a Coppola a daños ejemplares y punitivos en una cantidad para castigar y hacer un ejemplo de los demandados y disuadir dicha conducta en el futuro, como se probará en el juicio”.

Coppola a través de sus representantes negó enérgicamente las acusaciones en ese momento, y varias personas que trabajaron con él emitieron declaraciones refutando las acusaciones y atestiguando que su comportamiento fue legítimo.

Coppola reclama daños generales y específicos por un monto de al menos 15 millones de dólares, daños punitivos no especificados, cobertura de sus costos legales y cualquier otra reparación que el tribunal considere apropiada. También solicita un juicio con jurado.