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Hernán Lombardi: “Privatizar Aerolíneas permitirá que haya cientos de miles de turistas que en la actualidad no tenemos”

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El diputado recordó sus días como interventor de Parques Nacionales, habló de las medidas de fuerza de los pilotos y del papel del PRO en el gobierno de Milei

“Con las medidas de fuerza, los pilotos están llevando a Aerolíneas Argentinas a una situación de quiebra”, consideró Lombardi (fotos: Matías Garay).

En su reciente visita a Bariloche por la conmemoración del Día de los Parques Nacionales Argentinos, el diputado Hernán Lombardi indicó: “Celebrar al Perito Moreno en uno de los lugares más lindos del país siempre es un placer”, para luego considerar que el científico y naturalista dejó un legado que implica “un mandato”. En tal sentido, habló de “gente que pensó una Argentina distinta”

“Le debemos que estos territorios sean argentinos, pero, además, la idea básica de, como justamente decía Perito Moreno, preservar estos lugares para el solaz y goce de sus visitantes”, sostuvo, para luego considerar: “Toda la misión confluye ahí. Es decir, cuidemos la naturaleza, el medioambiente, pero ¿para qué?… Justamente, para el solaz y goce de sus visitantes. En esa visión conviven la conservación y el desarrollo sustentable”.

–En esa lectura que hace, ¿estaría incluida la captación de privados?

–Creo que la inversión privada es un gran movilizador de los parques. Por supuesto, sujeta a reglas. No miremos sólo al Nahuel Huapi, todo el sistema requiere inversiones claras, definidas –obviamente, orientadas por el organismo–, que el Estado no puede ni debe hacer.

–En su momento fue interventor de la Administración Parques Nacionales, durante el gobierno de la Alianza. ¿Cómo recuerda aquella etapa?

–Con mucho cariño, creo que cualquiera que pasa por Parques queda enamorado. Es una de las instituciones del Estado más sofisticadas para manejar, porque quien se encarga del organismo trata con elementos ecológicos y turísticos, obviamente, pero también con cuestiones que tienen que ver con relaciones con la comunidad, así como con lo económico, porque se vincula con la sustentabilidad de las empresas, en lo que hace a la gente que invierte… Pero, sobre todo, hablamos de la responsabilidad de administrar los sitios más lindos de la Argentina, y eso te llena de honor.

–¿Cómo fue que se llegó a aquella intervención?

–Yo era secretario de Turismo y le llevamos al presidente Fernando de la Rúa una auditoria con irregularidades de todo tipo y color, y él dijo: “Hay que intervenir, pero yo sólo confío en que usted se encargue”. Me acuerdo de esa charla… Le contesté: “Presidente, no puedo, soy secretario de Turismo”. “Lo tiene que hacer usted”, insistió…

–O sea, las dos funciones a la vez…

–Sí… Yo fui ministro de la Nación dos veces, ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, pero, en el fondo de mi alma, está Parques, por la satisfacción que uno tiene cuando ve que las cosas se pueden transformar. Porque Parques tiene una escala gigante, pero también una pequeña, donde se pueden destrabar diversas cuestiones.

–Un tema importante para Bariloche, a nivel transporte, se vincula a la conectividad aérea. Usted presentó un proyecto tendiente a la privatización de Aerolíneas Argentinas. ¿Por qué considera que hay que vender esa empresa?

–Lo importante es pensar acerca del sistema aerocomercial argentino. Es decir, cómo conseguir que los argentinos volemos más, mejor y más barato, además de estar más conectados. Dentro de ese sistema, Aerolíneas es un instrumento. En Argentina volamos un treinta y cinco por ciento menos que los chilenos. ¿Por qué? Si este país es más grande que Chile. Porque hay un problema de diseño institucional del sistema aerocomercial. Ahora se está cambiando para bien. Necesita una desregulación enorme y, a su vez, Aerolíneas precisa un cambio de manos en la tenencia de sus acciones. Las dos cosas tienen que ir juntas. Por un lado, la desregulación de los cielos, por ejemplo, para que lleguen vuelos a Bariloche sin pasar por Buenos Aires. ¿Por qué no hay vuelos de Estados Unidos directamente a Bariloche? Porque ha habido una trabazón del sistema aerocomercial, lleno de intereses, donde todo el mundo tiene que pasar por Buenos Aires. Por otra parte, existe una demanda desigual. Es evidente que los vuelos de Buenos Aires a Santa Rosa, La Pampa, no tienen la misma demanda que los que van a Iguazú. La estructura de Aerolíneas Argentinas prácticamente sólo permite aviones del mismo tamaño. ¿Por qué no se pueden tener aeronaves de cincuenta plazas? Porque la estructura institucional no lo permite, es una traba al desarrollo. Entonces, desregular los cielos y, al mismo tiempo, privatizar Aerolíneas permitirá que haya cientos de miles de turistas que en la actualidad no tenemos.

–En ese tema, ¿cómo analiza las recientes medidas de fuerza?

–Creo que tienen que ver con defender privilegios del gremio de pilotos, quienes, sin una visión estratégica, no se dan cuenta de que el mundo les cambió frente a los ojos.

–¿Piensa que la privatización debería ser inmediata?

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–Sí, claro. Además, creo que, con las medidas de fuerza, los pilotos están llevando a Aerolíneas Argentinas a una situación de quiebra. Sacar un pasaje, básicamente, implica confianza; si hacen un paro todos los días, los que están poniendo en riesgo la continuidad de le empresa son, con sus medidas absurdas, quienes conforman el gremio de pilotos. Hay otros sindicatos con un nivel de diálogo mucho más positivo.

–Como parte del PRO, ¿cómo observa al partido durante la gestión de Javier Milei? ¿Qué papel cumple?

–Por nuestra honestidad intelectual, tenemos que ayudar. En lo que hace a la economía, pensamos cosas muy similares a las que piensa el presidente Milei. Nuestra posición, en una crisis brutal como la que tiene Argentina, después del fracaso de todas las políticas populistas, es la de colaborar.

–¿No considera que existe el peligro de que el PRO sea “comido” por la fuerza política del presidente?

–Por supuesto que pensamos que la identidad del PRO, que se fue construyendo a lo largo de estos años, es relevante, pero lo importante es la Argentina.