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Horror: apuñaló 20 veces a su pareja y convivió con el cuerpo varios días
Decapitó el cuerpo de su novia.
En un caso que ha dejado a Escocia consternada, un joven identificado como Ewan Methven, de 27 años, confesó el asesinato y desmembramiento de su exnovia Phoenix Spencer-Horn, un crimen que ha sacudido profundamente a la comunidad de Lanarkshire. Este lunes, Methven compareció ante el Tribunal Superior de Glasgow donde admitió su deslizamiento a la oscuridad el pasado noviembre.
La escena del horror se desató en la medianoche del 16 de noviembre, en el pequeño apartamento en East Kilbride donde ambos convivían. Según relataron los fiscales, Methven, en un arrebato que aún no ha encontrado explicación, lanzó un ataque brutal que dejó a la joven de 21 años con 20 heridas de arma blanca antes de estrangularla. Como si el salvajismo no hubiera sido suficiente, intentó desmembrar su cuerpo en un intento de ocultar su crimen.
Los investigadores han revelado esfuerzos desesperados de Methven por encubrir su acto. Horas después del asesinato, se hizo pasar por Spencer-Horn enviando mensajes tranquilizadores a la madre de la víctima, asegurándole que su hija estaba bien. Este intento de subterfugio no fue más que una fachada frágil que pronto se vino abajo.
Durante el fin de semana, Methven llevó una vida que rozaba la normalidad, utilizando el auto de su víctima para desplazarse por la ciudad e incluso intentando adquirir drogas mediante llamadas frecuentes. Sin embargo, la realidad de sus actos lo alcanzó el 18 de noviembre cuando llamó al servicio de emergencias, confesando el asesinato en un tono que oscilaba entre el arrepentimiento y la confusión.
La policía encontró una escena macabra al llegar al lugar: el cuerpo mutilado de Spencer-Horn, un estremecedor reflejo de la brutalidad acontecida. Methven intentó justificar sus acciones aduciendo un episodio de psicosis inducida por drogas, argumentando desahogo y desencadenando un escalofrió incluso entre los investigadores más curtidos.
En un emotivo comunicado, la Policía de Escocia, representada por la inspectora jefa de detectives Susie Cairns, expresó con solemnidad como este caso ha dejado una marca imborrable en los corazones de aquellos que conocían y amaban a Phoenix. Esperan que la inminente sentencia le dé a su familia una dosis de justicia necesaria para sus corazones quebrantados.
El juez pronunciará sentencias mientras la población escocesa espera ansiosa un veredicto que haga justicia a uno de los peores crímenes que este país ha vislumbrado en tiempos recientes.
