Por Germán Hernández ([email protected])
La muerte de estos dos jóvenes artistas marcan el sentir de una buena parte de la cultura barilochense, sobre todo en el mundo de la música y del arte escénico. Aunque existe una coincidencia familiar entre ambos, por respeto a sus familiares y amigos, este diario prefirió no ahondar en esa situación.
Galo murió el 31 de diciembre del 2022. Seis días antes, Héctor Bastías manejaba alcoholizado, a la altura del km 14, e “invadió el carril contrario a pesar de existir visible allí doble línea amarilla y obstruyó la libre circulación del motovehículo honda xr 150″ que manejaba el joven, según consta en el expediente judicial.
En un juicio abreviado, el 25 de abril pasado, el hombre que ya estaba imputado recibió la pena de cuatro años y medio de prisión efectiva y ocho años de inhabilitación para conducir.
Menos de cinco meses después, otro artista local también perdió la vida. Se trata del músico Ezequiel “El Mago” Ruiz, quien falleció luego del impactante choque de este último miércoles en ruta 40, en la zona del lago Gutiérrez.
A raíz de la trágica noticia, se reprodujeron los mensajes de lamento por la muerte del hombre de 42 años, y talentoso músico de la banda “Pelusa en el Pupo”, entre otros proyectos. Desde la asociación musical MUEBA, expresaron en sus redes sociales: “Lamentamos profundamente la partida de nuestro colega ‘mágico’. Creemos que la música trasciende los planos y los tiempos, es así que su música, su risa y su energía seguirán aportando buena vibra en nuestros días”.
Además, “El Mago” también es una persona reconocida en “el mundillo” de la calle Mitre, ya que allí trabaja con el turismo, sobre todo de egresados, haciendo trucos de magia. En este marco, la escena artística local atraviesa un duro momento por la pérdida de dos de sus exponentes, por distintas razones, pero vinculadas a accidentes de tránsito.
