La Secretaria General de Presidencia, Karina Milei, finalmente reemplazó al Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en la reunión con los representantes de la cámara baja.
El Gobierno no quiere volver a cometer errores en el marco legislativo, por eso decidió reunir a legisladores aliados. Sucedió días después de que el arco opositor se expresara en contra del decreto que restringe el acceso a la información pública, medida que molestó incluso a aliados ocasionales, como el PRO. Según pudo saber Ámbito, este último punto fue discutido en el encuentro que se realizó en el Salón de los Escudos. Como contrapartida, el Gobierno ofreció a los representantes de la cámara baja evaluar la medida reglamentaria, para lo cual se conformará una mesa técnica.
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El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, fue el elegido para encabezar el encuentro con el objetivo de reponer el vínculo. No obstante, su internación en la clínica La Sagrada Familia por un agudo malestar gastrointestinal hizo que el cónclave recayera en manos de la hermana del Presidente.
Tras las derrotas legislativas que sufrió La Libertad Avanza con la reforma previsional, los montos asignados a la SIDE y la conformación de la bicameral de inteligencia, se decidió que la mesa chica del gabinete vuelva a ponerse al frente de los temas importantes de la gestión y, sobre todo, de la negociación política. En ese tono también se explicó la presencia de la funcionaria, y se disiparon de parte del Gobierno los rumores de un malestar con el Jefe de Gabinete. Vale mencionar que tampoco estuvo presente el asesor presidencial Santiago Caputo, quien ratificó hace unos días el curso del decreto que restringe el acceso a la información pública, pese a que Francos dijo en Diputados que podría haber modificaciones.
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Semanas atrás Javier Milei encabezó un encuentro con diputados por el veto a la reforma jubilatoria.
Por parte del Ejecutivo asistieron al intercambio el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger; el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán; el vicejefe de Gabinete, José Rolandi; el secretario de Relaciones Parlamentarias y con la Sociedad Civil, Omar De Marchi; y el secretario de Transformación del Estado y Función Pública, Maximiliano Fariña. También, en representación del Ministerio de Justicia, estuvieron presentes Flor Zicavo; y por la Secretaría de Educación, la asesora Eugenia Minolli.
Respecto al ámbito legislativo, dijeron presente el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem; y los diputados Gabriel Bornoroni, Nadia Marquez, Carlos Zapata, Santiago Santuario, Cristian Ritondo, Silvia Lospennato, Silvana Giudici, Oscar Zago y Eduardo Falcone.
El propio Javier Milei había recibido a la mayoría de los diputados que arribaron este lunes el pasado 30 de agosto. En esa ocasión, les explicó su decisión de vetar la reforma de la movilidad previsional que había aprobado el Congreso. El oficialismo busca aliados para la sesión especial que se convocó el miércoles a las 11, en la cual intentará mantener firme el veto.
El accidente que marcó el inicio de los 101 días de internación de Magalí Hall mientras estudiaba en su residencia universitaria en Bariloche. Mientras se preparaba para una jornada de estudio en el comedor de la residencia, el peligro se materializó: un calefactor sin las medidas de seguridad necesarias, junto con una botella de alcohol utilizada para borrar una pizarra, fue el detonante del siniestro. “El calefactor no tenía la chapa protectora ni el vidrio que cubre el fuego”, explicó la joven en exclusiva a Noticiero Seis.
Mientras relataba los detalles del accidente, Magalí recordó cómo levantó la botella de alcohol que había dejado en la mesa, y todo cambió en un segundo. “Se sobrecalentó y explotó”, relató. El fuego se extendió rápidamente por su cuerpo, lo que la llevó a tomar una decisión que, según ella, evitó una tragedia mayor. “Prendida fuego, subí corriendo la escalera para bañarme, porque si entraba a la habitación para taparme con una manta, quemaba la habitación porque es chiquita, llena de madera y tela”, afirmó.
Sorprendentemente, en ese momento la joven no sentía dolor y creía que el incidente no había sido tan grave. “Para mí estaba perfectamente bien, y no veía la gravedad porque estaba en shock”, confesó. Sin embargo, la situación era crítica. Vecinos cercanos acudieron rápidamente a ayudar, apagaron el gas y contactaron a la policía y la ambulancia.
Cuando llegó la ambulancia, Magalí estaba consciente y pensaba que su recuperación sería rápida. “Totalmente lúcida, pensando que al otro día me iban a hacer un certificado, que iba a faltar una semana a la universidad y que me iba a curar en tres días más”, comentó.
Sin embargo, la situación era mucho más seria. Apenas llegó a la guardia del hospital, los médicos le administraron morfina, y los próximos 50 días pasaron en un instante para Magalí, ya que cayó en coma. “Me desperté 50 días después”, dijo. Al despertar, se encontró rodeada por su familia y los profesionales de salud que la acompañaron durante su recuperación.
Uno de los aspectos más conmovedores de la historia de Magalí es el agradecimiento profundo que expresó hacia su familia y el personal del hospital. “En terapia intensiva fueron como mi segunda familia”, aseguró, refiriéndose a médicos, enfermeras y personal de limpieza que la acompañaron.
También destacó el rol fundamental de su cirujano plástico, Hernán Di Stefano, quien fue clave en su tratamiento. Pero, por encima de todo, Magalí se mostró profundamente orgullosa y agradecida por el apoyo incondicional de sus padres. “En terapia intensiva había una silla de plástico para dormir, y mamá y papá se turnaban para cuidarme”, comentó emocionada.
Además, Magalí no dejó de agradecer a sus amigos y conocidos de El Bolsón, quienes organizaron cadenas de oración y se mantuvieron atentos a su evolución durante todo el proceso. “Estoy maravillada de la familia y los amigos que tengo”, concluyó.
Actualmente, Magalí continúa con su rehabilitación kinesiológica y está planificando su alta médica, aunque sabe que su recuperación completa aún llevará tiempo. “Hoy por hoy comenzando la recuperación después de 101 días, planificando también una posible alta”, expresó esperanzada.
Sustrajeron elementos sanitarios y el ecógrafo portátil del DAPA, de un vehículo estacionado en el centro de la ciudad.
El hecho sucedió el miércoles 2 en horas de la tarde. Foto: archivo Marcelo Martínez.
El miércoles 2 de octubre, en horas de la tarde se produjo un hecho delictivo que afectó a la comunidad médica del Hospital Zonal. Sustrajeron elementos sanitarios y el ecógrafo portátil perteneciente al Departamento de Actividades Programadas para el Área del Hospital Zonal, que se encontraba en el interior del vehículo de uno de los trabajadores de salud pública, estacionado en la zona céntrica de Bariloche.
Las autoridades sanitarias solicitan a la comunidad la devolución de esta herramienta, fundamental para asistir a la población.
El ecógrafo portátil es un elemento de suma necesidad para los diversos Centros de Salud para campañas de prevención, controles y estudios, lo que permite que los vecinos de barrios alejados al centro no deban trasladarse al Hospital Zonal para realizar sus tratamientos.
Según Victor Parodi, jefe del DAPA, el aparato se usa sobre todo para controles ginecológicos, salud escolar o lo utiliza el equipo modular para el asesoramiento de la interrupción voluntaria del embarazo.
“Ese ecógrafo no le sirve a nadie que no trabaje en el sector salud y que realice este tipo de estudios. Si bien el costo del instrumento es de una elevada cifra en dólares, no lo van a poder vender acá en la ciudad. Por eso pedimos que lo devuelvan” expresó Parodi.
Con la pérdida de esta herramienta necesaria para realizar la asistencia ambulatoria de los vecinos de los barrios, se estima que en los próximos días se incrementará la demanda de estudios en los ecógrafos fijos que posee el Hospital Ramón Carrillo. (ANB)
En el marco de una futura entrega de viviendas sociales, en un número cercano a las cien unidades habitacionales existe un trabajo conjunto entre el Instituto de Promoción y Planificación de la Vivienda (IPPV) y la Cooperativa 13 de Mayo. Recientemente se definió el listado de beneficiarios y esto generó diferentes conflictos con un grupo de asociados al plan de que fueron retirados e indicaron que no les habían planteado esa posibilidad.
Puntualmente el vecino Braian González, actuó como vocero del grupo que se sintió desplazado y relató que luego de siete años de aportar para su vivienda, quedó fuera del listado de beneficiarios por no cumplir con los requerimientos del Instituto provincial. Mencionó que nunca se lo habían indicado. Incluso relató que el ingreso del instituto al plan data del 2021 y nunca le pusieron en duda su condición de adjudicatario. Además le indicaron que le devolverán el dinero aportado en términos nominales, sin contemplar la inflación.
El interventor del IPPV Mariano Lavín en diálogo con Radio Seis dijo que conoce al detalle el tema. Señaló que la normativa está establecida desde el primer momento y que tuvieron que hacerse correcciones a los criterios de la cooperativa 13 de mayo. “Hay cupos y requisitos que están establecidos y no se estaban cumpliendo. El cupo discapacidad exige un 10% de las unidades y la cooperativa había destinado solo un 6%. El cupo para beneficiarios solteros debe ser el 5% y la cooperativa tenía contemplado un 35%. Muy por encima de los previsto”.
Existieron casos llamativos también que Lavín describió del siguiente modo “Hubo dos casos de titulares que no tenían domicilio en Bariloche y una pareja no formalizada con hijos en común, que intentaron ser beneficiados con una segunda vivienda, dado en una plan anterior habían recibido ya una casa”.
El interventor indicó que el IPPV no se vincula con el beneficiario. “La relación es con la institución, en este caso una cooperativa. Las cooperativas deben dejar claro los requisitos a sus asociados”.