Recorrieron laboratorios, asistieron a charlas de divulgación y conocieron a docentes e investigadores del Instituto Balseiro, del Centro Atómico Bariloche e incluso de la empresa INVAP. Esa semana de experiencias fue el premio por haber ganado el concurso nacional de monografías que organiza cada año -desde 2022- el Instituto Balseiro. El grupo estuvo compuesto por 15 estudiantes de los últimos dos años del secundario, provenientes de distintas partes del país, quienes viajaron a Bariloche entre el 20 y el 26 de octubre.
Así, cada estudiante obtuvo una “Beca Instituto Balseiro para estudiantes de escuelas secundarias”. “Este año la consigna del concurso fue escribir sobre los vaivenes de la inversión en ciencia en Argentina. Los participantes tuvieron que investigar cómo fueron variando las políticas de inversión a lo largo de la historia de nuestro país, aportando una mirada crítica y reflexiva”, comentó Guillermina Amica, integrante del comité organizador.
El interés que generó la convocatoria se reflejó en la gran cantidad de postulaciones. “Recibimos alrededor de 300 trabajos provenientes de más de 180 escuelas de todo el país”, mencionó Amica, y agregó que el proceso de selección fue muy arduo, organizado en distintas etapas, debido a la alta calidad de los trabajos.A diferencia de otros años, en esta edición los participantes debían incluir entrevistas, encuestas de elaboración propia e incluso podrían proponer debates.
Los estudiantes premiados viajaron desde la Ciudad de Buenos Aires y desde las provincias de Misiones, Catamarca, Buenos Aires, Corrientes, Córdoba y Tucumán, junto con dos docentes que supervisaron los trabajos ganadores. “Venían de diferentes escuelas y modalidades: hubo participantes de humanidades, bachilleratos, escuelas técnicas, y de especialidades en sociología y economía”, afirmó Nadia Gamba, también miembro del equipo organizador.
Una vez en Bariloche, los ganadores interactuaron cada día con investigadores de distintos laboratorios del Balseiro y del Centro Atómico Bariloche. Entre los temas abordados se incluyó la compresión de hidrógeno, las técnicas de litografía para microfabricación, el espectro de luz visible y los átomos, materiales cerámicos para aplicaciones en energía, superficies, rayos cósmicos y materia oscura, los misterios del universo,la absorción de potencia en ferrofluidos, y la hipertermia magnética. Además, visitaron el reactor CAREM, el reactor experimental RA-6, la Fundación Médica Intecnus y la compañía de base tecnológica INVAP.
Al ser consultados sobre la experiencia vivida los participantes compartieron varias opiniones. “Me llevo un montón de cosas súper enriquecedoras y muy lindas. No solo el grupo de estudiantes que pude conocer y de quienes aprendí mucho y con los que pasamos muy buenos momentos, sino también el increíble establecimiento que pudimos visitar, los brillantes profesores que nos dieron las charlas y todas las experiencias y lugares nuevos que conocí”, expresó Julieta Rodríguez, del Colegio Nuestra Señora del Rosario de Nueva Pompeya, Necochea, provincia de Buenos Aires.
Por su parte, Sol Permigiani, del Instituto Nuestra Señora de Lourdes de Unquillo, Córdoba, comentó: “Me parece que es una experiencia mágica a la que todos deberíamos tener acceso, porque muestra la ciencia como algo accesible para todos y humaniza a aquellos locos de pelos parados, canas, lentes y bata blanca que creemos que son los científicos”. Y agregó: “Nos muestran que los sueños y esas cosas chiquititas que a veces no podemos procesar realmente están ahí y están para todos”.
Desde el comité organizador agradecen a todos aquellos que hicieron posible esta actividad: en primer lugar, a los docentes que guiaron a los chicos en la escritura de las monografías; también a los miembros de la Comunidad CAB que colaboraron en la selección de los trabajos ganadores, y a los docentes investigadores que brindaron charlas y abrieron las puertas de sus laboratorios para que los estudiantes conocieran en qué trabajan. Finalmente, los agradecimientos se extendieron a las instituciones de las que depende el Instituto Balseiro: la UNCUYO y la CNEA.
Estudiar en el Balseiro
El Instituto Balseiro es una institución pública de educación superior, dependiente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO). Ofrece becas completas a sus estudiantes en cuatro carreras de grado: Licenciatura en Física, Ingeniería Nuclear, Ingeniería Mecánica e Ingeniería en Telecomunicaciones. Además, se pueden cursar tres maestrías (en Física, Ingeniería y Física Médica), tres doctorados (en Física, Ciencias de la Ingeniería e Ingeniería Nuclear) y la Carrera de Especialización en Aplicaciones Tecnológicas de la Energía Nuclear (CEATEN).
Su equipo docente está compuesto por profesionales de la ciencia y la tecnología que son referentes en sus áreas, y se prioriza una enseñanza personalizada. La institución está situada en un ecosistema de laboratorios de investigación y desarrollo (I+D) del Centro Atómico Bariloche y de empresas de base tecnológica como INVAP. Las aulas del Balseiro están rodeadas de los paisajes del norte de la Patagonia, con lagos, montañas y ríos para disfrutar durante las cuatro estaciones del año.
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* Por Área de Comunicación Institucional y Prensa / Instituto Balseiro (CNEA-UNCUYO)