Los trabajadores del Parque Nacional Nahuel Huapi, nucleados en distintos gremios estatales, realizaron una asamblea para abordar la situación que se vive en Villa Mascardi luego del acuerdo firmado entre el Estado y la comunidad mapuche.
“Nos manifestamos en absoluto desacuerdo en la forma en la que el Estado, a través de la Secretaría de Derechos Humanos, se comprometió a reconocer y otorgar permiso del uso de tierras del área protegida”, dejaron asentada en un acta.
La asamblea se realizó días atrás luego de que se confirmara el acuerdo entre el Estado y la comunidad Lafken Winkul Mapu en el que se deja asentado que se respetará el “rewe” o lugar sagrado, donde podrán construir tres viviendas para la “machi” Betiana Colhuan y otras dos personas.
Para los trabajadores, la comunidad es “un grupo de personas que en forma espontanea ocupó y ejerció poder en el territorio durante cinco años, impidiendo la circulación, fiscalización y atentando contra la integridad de los trabajadores, sus familias, visitantes, residentes y el ambiente”.
Además, consideraron que este acuerdo sienta un precedente sobre el “otorgamiento de tierras de forma violenta e ilegítima a personas que se imponen” en contra de los procesos legales.
Por esto mismo también solicitaron que no se avance con la posible reubicación de la comunidad, ya que en uno de los encuentros de la mesa de diálogo se había señalado como posibilidad, su traslado a tierras en cercanías del lago Guillelmo.
Por todo lo expuesto, los trabajadores solicitaron que “se garanticen todas las medidas de seguridad” para las personas que se deben desempeñar en el área y remarcaron que ya hay antecedentes de violencia que debieron sufrir.
Ante la situación, requirieron al presidente de Parques Nacionales para dialogar sobre la situación. (ANB)
