Sociedad
Un acto histórico en la Escuela 154: 16 estudiantes presentaron la Wenufoye en el Día de la Bandera
En el marco del Wiñoy Tripantu y durante el tradicional acto de promesa a la bandera que realizan cada año, niñas y niños del barrio El Frutillar reivindicaron la diversidad cultural con un gesto cargado de ternura, identidad y comunidad.
20/06/2025 15:01 Hs.
El acto, cargado de emoción, se vivió en ambos turnos del establecimiento. Fotos gentileza
Mientras muchas escuelas del país celebran por estos días el tradicional acto de promesa a la bandera, en Bariloche se vivió un hecho histórico que refuerza la diversidad y el encuentro intercultural.
En la Escuela Primaria 154 del barrio El Frutillar, dieciséis niños y niñas presentaron la Wenufoye —la bandera del pueblo mapuche— en el mismo acto donde se realizó la promesa a la bandera argentina, un momento profundamente simbólico para el sistema educativo.
El acto, cargado de emoción, se realizó en coincidencia con el Wiñoy Tripantu, el Año Nuevo Mapuche, y fue el resultado de un trabajo sostenido durante todo el ciclo lectivo. La actividad no solo buscó reconocer identidades preexistentes al Estado Nacional, sino también promover el respeto, la pluralidad de voces y la construcción colectiva dentro de la escuela pública.
El trabajo de muchos años, con respeto y amor, se vio plasmado en este acto. Foto: gentileza
“Estamos muy felices por esto que sucedió, celebrando que podemos sostener, en este contexto político, una escuela que aloja la diversidad con fuerza”, expresó la vicedirectora Mariana Moran en diálogo con ANB, quien además se reconoce como mujer mapuche, docente y estudiante de Mapuzungun. “Como dije, no es fácil reconocerse como mapuche en estos tiempos, pararse frente a toda una comunidad y decir: yo soy mapuche y esta bandera también me representa”, remarcó.
Moran explicó que el trabajo se llevó adelante en comunidad, con el acompañamiento de colegas y familias, algunas de las cuales están en proceso de recuperar sus raíces. La actividad incluyó a niñas y niños mapuches y no mapuches, que decidieron de forma solidaria acompañar este gesto de visibilización cultural.
No faltaron obstáculos: también hubo resistencias de algunos sectores, expresadas incluso en redes sociales. “Pudimos dar respuesta con las reglamentaciones que nos avalan dentro del marco de la escuela pública. Y, sobre todo, pudimos dialogar con las familias: contarles que esto no es una imposición, ni una puja por cuál bandera vale más, sino un reconocimiento de que somos diversos y diversas, y que todos habitamos este territorio con sus múltiples saberes y memorias”, señaló la vicedirectora.
Desde UnTER Bariloche también destacaron el valor del acontecimiento: “La escuela pública aloja y fortalece las identidades preexistentes a la conformación del Estado Nacional, con ternura y amorosidad. Fue un acto de Unidad, Identidad, Soberanía y Libertad”, expresaron.
A pesar de la resistencia de algunos sectores, reconocieron que pudieron trabajar para hacerles comprender el valor de la identidad. Foto: gentileza
Este hecho no es aislado, sino parte de una red de experiencias pedagógicas que desde hace años docentes y comunidades vienen impulsando en distintas escuelas de Bariloche, muchas veces con creatividad y resistencia, tejiendo espacios de encuentro para fortalecer a las infancias.
“Küme we tripantu ngepe eymi” —“Buen año nuevo para todos”— fue el deseo que cerró la ceremonia, pero también una declaración de principios: el derecho de niñas y niños a crecer reconociendo sus raíces, en una escuela que abrace, contenga y construya comunidad desde el amor. (ANB)