Una chica de 22 años sufrió un ataque de pánico mientras conducía su auto en dirección al centro de Bariloche y otros conductores debieron detenerse para auxiliarla.
El episodio ocurrió este lunes a las 7 en el kilómetro 10 de la Avenida Bustillo. La conductora del Toyota Etios transitaba en dirección al centro de la ciudad cuando sufrió un ataque de pánico y debió arrojarse a la banquina, debido a que no pudo seguir manejando.
El rodado quedó sobre los arbustos que están sobre la banquina. El brusco movimiento fue detectado por otros conductores quienes se detuvieron para brindarle asistencia.
Como no podían abrir la puerta del vehículo, decidieron estallar uno de los cristales y de esa manera abrir el auto y asistirla.
Convocaron a una ambulancia para que reciba asistencia médica, ya que quienes la ayudaron desconocía cuál era la situación. La Policía de Río Negro también trabajó allí, y organizó el tránsito para permitir las maniobras de la ambulancia.
