Investigadoras del CONICET en el INIBIOMA están evaluando el impacto de los microplásticos en la salud de las abejas de miel y otros insectos sociales. Además están participando de un concurso de fotografía del cual la comunidad puede emitir su foto.
Marina Alma y Micaela Buteler con sus equipos de becarias e investigadores son quienes están desarrollando el proyecto y han publicado un artículo en Nature destacando la falta de regulación sobre el uso de plásticos en la producción orgánica.
Alma entrevistada en el programa Agenda que se emite por El Cordillerano Radio (93.7) habló del trabajo que vienen realizando y que resulta necesario difundir para una mayor concientización acerca del cuidado de nuestro entorno.
Habló en primer lugar sobre qué le atrajo del tema microplásticos para desarrollarlo luego en una investigación científica. “En el doctorado estudié hormigas y mi foco era entender por qué y en qué contexto utilizaban respuestas colaborativas o individuales, cuáles eran las ventajas y desventajas de ser social”. Además quería saber qué factores modulaban estos comportamientos.
Al finalizar ese doctorado sentía que aún le faltaba algo que resolviera un problema real, que desde su conocimiento pudiera aportar sobre insectos sociales y desde la biología de los animales. En esa búsqueda de generar una solución se encontró con los microplásticos.
El tema surgió gracias Micalea, a una compañera de trabajo. Empezamos alrededor del 2019 analizando qué contaminación tenían los lagos de la Patagonia y si había una relación con la cercanía a poblaciones humanas”.
No quiso sonar pesimista pero con lo que se encontraron no fue nada positivo. “Vimos que todos los lagos, sin importar qué tan cerca están de la ciudad de Bariloche, tenían la misma cantidad de microplásticos en el agua”.
Muestrearon los periurbanos al Nahuel Huapi, Gutiérrez y al Moreno y como más alejados Mascardi, Espejo Chico y Espejo Grande. “No hubo una diferencia significativa y encontramos 5.257 micropartículas por metro cúbico de agua”.
Es un número que se compara a otros lagos del mundo. “Otra cosa muy interesante con la que nos encontramos fue en el Nahuel Huapi, primero en un punto anterior a la Planta depuradora y luego otro posterior, éste último tenía mayor contaminación de micro plásticos que el que estaba antes”.
Con respecto al factor que creen que está causando esto la investigadora dijo “la mayoría de la contaminación que encontramos provenía principalmente de micro fibras textiles, una de las causantes es la derivación del agua de los lavarropas, que termina en las aguas del lago”. Aseguró que eso se podría revertir.
Cómo se transportan
Al saber que todos los lagos de la región tiene el mismo nivel de contaminación con micro plásticos Alma dijo “creemos que tiene que ver con la forma en que se transportan en el ambiente, que es a través de corrientes de aire atmosféricas”.
Esto hace que cualquier parte del mundo pueda adquirir esa contaminación ya que es trasladada por las corrientes de aire y los vientos, esto está comprobado ya que algunos estudios muestran que hay contaminación en zonas del mundo que no tiene contacto con el ser humano.
La investigadora afirmó que hay micro plásticos en todo. “En lo que comemos, lo que respiramos, bebemos y tocamos”. El problema en realidad deriva de que el plástico no se degrada. “Lo de reciclar es medio una falacia y en el mundo es solo un 10 por ciento el que se recupera y estamos hablando de millones de toneladas de plástico”.
Citó que solo en la agricultura se generan 12.5 millones de toneladas de plástico anuales. “Eso equivale solo al 3,5 de la producción plástica del mundo, una cantidad abismal”.
Al hablar sobre qué se está haciendo para frenar esto, intentó ser un poco más positiva. “Hay organizaciones mundiales que hace varios años vienen tratando de discutir y debatir qué se puede hacer con este problema y el asumir que lo tenemos ya es un primer paso”.
Aún esto no se ha traducido en comenzar a ocuparse. “Hace algunos meses publicamos una nota en Nature, una de las revistas más prestigiosas del mundo en la que evidenciamos que la legislación de la producción orgánica no regulaba el uso de los plásticos”.
Se puede ser un productor orgánico y utilizar todo el plástico que se desee. “Eso va en oposición a lo orgánico que propicia un cuidado del medio ambiente teniendo en cuenta el impacto que puede generar en otros sistemas, no solo en el propio”.
en relación con eso encontraron que en Estados Unidos se regula el uso de unos cobertores del suelo que previenen el crecimiento de la maleza y retienen el agua. “Ellos regulan el uso de esta práctica y dicen que el productor lo debe reemplazar todos los años pero no se sabe qué hace con el que quita del campo”.
El microscopio muestra una realidad que impacta.
¿Tenemos incorporado al plástico?
Ante la pregunta si los seres humanos tenemos incorporada la utilización del plástico Alma dijo “es un estudio que queremos realizar, saber cuál es la percepción que tenemos del material y qué pensamos que pasan con esos plásticos y si realmente lo consideramos un compuesto contaminante”.
Por eso quieren evaluar cuánto se utiliza en Bariloche en la producción. “^Pero también pensamos que tenemos que ir a visitar cada campo de producción porque muchas veces la gente no sabe que está utilizando plástico, mucha gente no sabe que cuando la ropa dice que tiene sintético, es plástico”. Todo esto será muy útil para saber cuánto plástico utilizamos a diario quizás sin saberlo.
Las abejas
En base a la contaminación de los lagos de la región, comenzaron a estudiar las abejas de la miel y si esa miel tenía o no micro plásticos. ”Es un problema que tenemos hoy y hay muchas cosas que no pueden hacer, el material pasa por su aparato digestivo y termina en las larvas y en la miel que terminamos consumiendo los humanos”. Un círculo interminable de contaminación.
Hay un pequeño escarabajo de la colmena. “Una plaga dañina que ocasiona problemas para la abeja y adquiere un costo económico, para combatirlo los apicultores ponen unas telas arriba de las colmenas, son de plástico y ahí queda atrapado el escarabajo pero la abeja termina manipulando ese material porque al encontrarse con eso en su colmena lo empieza a romper con sus patas”. Por eso hay que comenzar a pensar en qué y cómo se hacen las cosas y las consecuencias que pueden tener.